Declaración pública sobre plebiscito constitucional y proceso constituyente
El 26 de abril debió realizarse el plebiscito inicial para un proceso constitucional que el pueblo impuso con su justa lucha y la protesta social. Su postergación no significa de ninguna manera renunciar a tan sentido propósito. Crear una nueva Constitución Política es el desafío fundamental del periodo histórico que vivimos. Para el Partido Comunista de Chile se trata de un proceso en curso que abra paso a la superación de un modelo político y económico que ha consagrado la desigualdad y cuyo resultado ha de ser una Constitución que distribuya tanto el poder como la riqueza. La redacción de una Nueva Constitución debe ser un momento de recuperación de la soberanía del pueblo.
En el marco general del principio universalmente aceptado de libre determinación de los pueblos, es indispensable reconocer la soberanía en el pueblo. Esto luego se traduce en una serie de reconocimientos adicionales necesarios para construir un país que atienda la realidad de su gente. Así, por ejemplo, implica reconocer a la mujer y la igualdad de género como tarea política principal; involucra el reconocimiento a nuestros pueblos indígenas y su cultura mediante un Estado Plurinacional; significa reconocer la subordinación de las Fuerzas Armadas y de Orden al mandato popular y no a si mismos; se traduce en el reconocimiento a la soberanía económica sobre los recursos naturales y el derecho al desarrollo y la soberanía alimentaria. Es el camino hacia una sociedad incluyente, democrática y representativa.
Orientará, además, la mirada constitucional centrada en las personas, en los colectivos y en sus derechos. Conlleva la creación de un Estado de derechos que mejorará la salud, la vivienda, la educación, el trabajo, las pensiones, el acceso al agua, la protección de los recursos naturales, entre otros. Generará mayor igualdad y bienestar a largo plazo. La Constitución de derechos es un acto de soberanía y es, en concreto, la superación histórica y necesaria del rol subsidiario del Estado, al que pondremos fin.
El Partido Comunista promoverá un nuevo sistema político democrático participativo y paritario, con un Congreso unicameral y un Presidente que no pueda desoír la voz del pueblo, como sucede cuando marchan 200 mil personas exigiendo el fin de las AFP y el gobierno responde con un proyecto de ley que las fortalezca. Eso tiene que terminar. Promoverá asimismo, un territorio descentralizado que crea gobiernos locales y con transferencia de poder a las regiones
Una nueva Constitución ha de ser un NO al abuso y el atropello. El trato digno a las personas debe primar por encima del interés de las empresas y las instituciones y el quehacer económico, educativo, científico e institucional debe propender a satisfacer los requerimientos de una sociedad cada vez más exigente en materia de fiscalización, transparencia, sustentabilidad e inclusión.
La seguridad de las personas es fundamental y la orientación constitucional debe superar la doctrina de seguridad nacional y de criminalización de la protesta social. La nueva Constitución debe garantizar la seguridad del hogar y las personas, debe proteger a las mujeres, a la niñez y a las y los trabajadores. La persecución al delito debe incluir a todos los delincuentes, incluyendo los de cuello y corbata y debe cesar la criminalización de los jóvenes y extranjeros.
El aplazamiento del plebiscito no es la suspensión de la tarea política del momento, es solo una nueva fecha que nos permite acumular mas fuerzas. Convocamos al Partido a activar las redes sociales promoviendo estos contenidos constitucionales.
Yo Apruebo la Nueva Constitución y la Convención Constitucional.
Partido Comunista de Chile
abril 27 de 2020