Respuesta del PC a carta de ex jefes militares

El Partido Comunista de Chile recuerda en este día y expresa su profundo reconocimiento al Presidente Salvador Allende Gossens y a todas las víctimas de la represión pinochetista  y manifiesta su saludo fraterno a los familiares, a los partidos políticos y a las organizaciones sociales, que fueron tan trágicamente afectadas, por las políticas de tortura, de exterminio y desaparición de personas, entre ellas también, miembros activos de las diversas ramas de las Fuerzas Armadas, Carabineros, Investigaciones y Gendarmería que se opusieron al golpe y defendieron el orden constitucional.

Fueron víctimas de la tiranía artistas e intelectuales, periodistas, dirigentes sindicales y dirigentes de los partidos de izquierda, ex generales, ex ministros, dirigentes estudiantiles, representantes de pueblos indígenas, con tratos degradantes especialmente a las mujeres.

Están en proceso de investigación las muertes del ex Presidente Eduardo Frei Montalva y Pablo Neruda.

Conocimos de prácticas tan aberrantes, como la Caravana de la Muerte, la Operación Cóndor, el degollamiento de personas, la desintegración de restos humanos para entorpecer su identificación, el lanzamiento de cuerpos al mar, los centros de tortura, los campos de concentración, la expulsión del país.

No se sabe nada aún de más de mil personas detenidas desaparecidas.

No es posible olvidar esta etapa trágica por hechos que no tienen justificación alguna, ni política ni moral. Quien pretenda justificarla solo pretende justificar su propia responsabilidad directa o indirecta y no está claro cuál sería su conducta en el devenir futuro de nuestra historia.

Los comunistas sólo exigimos verdad y justicia, no nos mueve ni el odio ni la venganza. No queremos tratos especiales para quienes están condenados por crímenes de lesa humanidad, pero tampoco buscamos tratos degradantes de la persona.

Como la gran mayoría del país no queremos volver a la confrontación fratricida a que nos obligó la dictadura, queremos el reencuentro que es necesario para seguir consolidando y perfeccionando nuestro sistema democrático. Para ello hace mucha falta la colaboración de uniformados que tuvieron distintos grados de responsabilidad en el mando y de los civiles con responsabilidad de Estado, para conocer,  sobre todo, el paradero de las personas detenidas desaparecidas.

Nuestro llamado hoy es al reencuentro, sobre la base de la verdad y la justicia, sin odio y con la vista puesta en el futuro de nuestro país y de las futuras generaciones, para que nunca más viva esta tragedia.